El webinar ‘Soluciones para afrontar la crisis después del Covid-19’, organizado por la Asociación de Empresas Familiares de la provincia de Alicante (AEFA) y El Círculo-Directivos de Alicante, que contó con expertos en asesoramiento de empresas del despacho profesional Galán&Asociados, concluyó en la necesidad de iniciar procesos de reestructuración de las empresas para poder aprovechar las oportunidades que se abren tras la superación de la pandemia. El director del Departamento de Estrategias y Organización de Galán&Asociados, Jordi Pardines afirmó que la crisis será dura, pero habrá una recuperación rápida y muchas oportunidades a medio plazo, siempre y cuando las empresas se hayan preparado previamente.
Para ello, los expertos de Galán&Asociados recomendaron iniciar un proceso de reorganización interna de las sociedades a todos los niveles para “adaptarse a lo urgente, sin perder de vista lo importante”, comentó Pardines. El directivo de Galán&Asociados recomendó que las líneas de reestructuración de las empresas deben centrarse en un replanteamiento de la estrategia de la empresa, una revisión del modelo de negocio y un análisis de la liquidez y de la solvencia.
Con el objetivo de sostener y fortalecer a las empresas, durante la videoconferencia se analizaron otros aspectos importantes como las necesidades de financiación y capitalización de la empresa y toda la batería de soluciones, entre ellas el concurso de acreedores, para evitar la liquidación de la sociedad y prepararlas al medio plazo.
Pardines fue muy claro en su exposición: “la crisis es de mayor calado que la de 2008, porque ha sido más rápida y más profunda. Y ante una situación nacional e internacional como esta no hay otra solución que tomar medidas”. Desde su punto de vista, también habrá un proceso de recuperación más rápido que en la crisis financiera pasada, aunque dudó que fuera en forma de ‘uve’ como apunta el FMI.
“De lo que no tenemos dudas es que el mercado internacional volverá a recuperarse, no hay otra opción según la configuración actual de interdependencia global, aunque algún Estado apueste por el proteccionismo”, comentó el responsable de Estrategia y Organización, quien explicó que “precisamente por este fenómeno, y debido a que muchas empresas no podrán superar la crisis, lo que tenemos será un mercado con menos competencia, con demandas crecientes tras un bloqueo inesperado de la economía y con cambios muy interesantes como la vuelta de los procesos productivos a Europa y España desde países asiáticos. Y todo ello genera oportunidades de negocio si preparamos a nuestras empresas”.
De preparar a las empresas, en concreto a las de carácter familiar, hablaron el director del Departamento de Corporate, Ángel Cebrián, y el director del Área Jurídica de Galán&Asociados, Jesús Navarro.
Cebrián recomendó controlar y anticiparse a los problemas de tesorería, que son los que en realidad ejercen la selección natural entre las empresas que continúan vivas o las que mueren en situaciones de crisis como la actual. Desde su experiencia relató las posibilidades de crédito de fuentes públicas o privadas ofertadas con motivo de la pandemia, pero también de otras alternativas como la entrada de socios, que pueden permitir que la empresa perdure en el tiempo.
Concurso de Acreedores
Por su parte, el director del Departamento Jurídico, Jesús Navarro, recomendó de partida separar el patrimonio de la empresa del patrimonio personal. “Nuestro modelo no es como el anglosajón, donde sí hay posibilidades de resurgir de las cenizas, aquí no hay segundas oportunidades o son muy difíciles por las cuestiones administrativas y normativas”, añadió.
Navarro relató que en caso de tensiones de tesorería muy duras o de evidente situación de colapso por la falta de ingresos y la suma de deuda, lo “más recomendable es parar y analizar, antes de tomar decisiones. Cada caso es un mundo, y cada mundo necesita una solución diferente”. El experto de Galán&Asociados recordó que el Gobierno ha ampliado los plazos para presentar la solicitud del concurso de acreedores, “lo que nos da más tiempo para analizar y tomar una decisión. Es cierto que el concurso de acreedores no es la solución para todos los casos; pero también hay que decir que el concurso no debe ser visto como un problema, sino que en la mayoría de casos es una solución para asegurar la viabilidad de la empresa”.
Para que esto ocurra, según Navarro, es importante contar con personal con mucha experiencia, asesoramiento experto y conocimiento en estas circunstancias que permita dirigir el proceso para que el concurso de acreedores sea una herramienta que asegure la empresa.