- 12 abril, 2012
- Publicado por: Consuelo
- Categoría: El Círculo
Cuando la ética se desarrolla en el marco de la empresa, se la conoce como ética empresarial, que no es más que el conjunto de valores, normas y principios que, reflejados en la cultura de la empresa, pretenden alcanzar una mayor sintonía con la sociedad.
La ética empresarial muestra cómo una compañía integra un conjunto determinado de principios –valores- en sus propias políticas, prácticas y en la toma de decisiones en todos los ámbitos dela empresa. Adicionalmentela ética empresarial implica comportarse de acuerdo con las leyes y las regulaciones internas.
Las empresas se componen de personas que realizan una actividad que se materializa en un producto o servicio; son sistemas complejos de agentes económicos y sociales que producen bienes o servicios destinados a la venta o distribución, que intercambian información, que hacen transacciones de diversa índole y que finalmente involucran a esas dos grandes realidades de nuestra vida cotidiana: el trabajo y el mercado.
El comportamiento ético deviene fundamental para triunfar en los negocios pues estos tienen que ver con personas, personas que consiguen el beneficio para los accionistas y pueden elegir hacerlo con sensibilidad social o bien preocupándose únicamente por el resultado, sin cuestionarse la forma en que se llega a él.
Una buena actuación ética es simultáneamente una buena actuación profesional, siendo hacer honradamente el propio trabajo una de las exigencias del hombre en cualquier cultura. La ética empresarial parte de unos principios que son comunes a los de la ética general. Si genuinamente se mantiene una preocupación por los empleados, en las dimensiones de calidad, ambiente, remuneración, sentido de familia, incentivos, seguridad, proporcionándoles «dignidad y respeto», el trabajador estará motivado para producir, lo hará con calidad, y esto redundará en beneficios parala empresa. Ademásde fomentar un ambiente de trabajo excelente para sus empleados, la empresa debe procurar presentarse frente a la sociedad de manera honrada, veraz y honesta, procurando el bien social.
En los últimos años, la preocupación por las cuestiones éticas se ha extendido de forma inusitada en la práctica empresarial. De una parte, se fomenta el compromiso de los trabajadores con su empresa a través de la identificación con la cultura corporativa, compartiendo todos los empleados la misión, visión y valores de esta. De otro lado, hay una mayor conciencia social sobre la actuación de las empresas, mediante la cual la sociedad exige más seguridad, más calidad en los productos, o veracidad de la publicidad, entre otras demandas. Se exige una actuación de la empresa conforme a los principios y valores éticos preponderantes en la sociedad en que se instala.
Otros factores, como la globalización, la pérdida de confianza depositada en determinadas empresas o en sectores enteros, o incluso la necesidad de armonizar los intereses globales de la empresa con los de cada uno de sus miembros, han impulsado también que la ética pase a un primer plano en el contexto empresarial.
Así, la ética, se configura en instrumento que ayuda a la empresa a afianzar la credibilidad social, buscando la satisfacción de los derechos de todos los grupos de interés como son los accionistas, propietarios, trabajadores, clientes, proveedores, etc., aunando así intereses de empresa y sociedad.
El comportamiento ético trata de instaurarse de tal manera que los puestos, los cargos, las instituciones se vean impregnadas por acciones éticas y honradas, y que éstas sean la norma y no la excepción.
En la próxima entrega, detallaré los principios en que se basa se comportamiento ético de la empresa.