- 4 noviembre, 2012
- Publicado por: admin
- Categoría: Actualidad
Amiguismo, miedo a no ser aceptado, dependencia social, no saber imponerse… Varias son las razones por las que un superior accede a todo y sólo sabe contestar ‘sí’. Esta actitud puede ser dañina porque deriva en una comunicación sumisa, más carga de trabajo para el equipo e incluso niveles de estrés en el directivo. Un ‘no’ a tiempo evita esfuerzos innecesarios.
En este proceso, tampoco vale aprender a decir no sin más. “Un ‘no’ de ahora puede ser un sí en el futuro, un ‘no’ que no cierre las posibilidades. Por eso, es bueno que la negativa se explique, se justifique”, señala Enrique Alcat, director del programa superior en Gestión Empresarial y Dirección de Comunicación de IE Business School. Según este experto, “el ‘no’ sin más puede suponer desmotivación en los equipos. Por eso, hay que cuidar las formas, los tiempos para que ese ‘no’ no sea frustrante”. Son más importantes las razones que acompañan al ‘no’ que la negativa en sí misma. Además, con su debida explicación es más fácil decir ‘no’ a quién le cueste hacerlo.
(Fuente: http://www.expansion.com/2012/10/30/empleo/desarrollo-de-carrera/1351618146.html)